Una semejanza a un regalo
Respira, y piensa que todo es un regalo. Unos a punto de ser embalados, otros usadisimos, otros recién descubiertos y otros, esperándote.
Piensa que es un instante radiante todo.
Sueña con los momentos infinitos porque la realidad nos muestra lo perecedero.
Mírame con ojos reales y abrázame para cerrarlos bien fuertes y segura de mí misma. Tus ojos no son tus ojos nada más, son el faro de mi océano revuelto y descubierto ya...
Esto es un regalo que estoy creando, nada más y nada menos, un regalo que está por llegar.De aquéllos que te esperan sin antes saber de su existencia.
Herczeg Yael


Commentaires