Bum!
Nunca me fui tan despacio de Gerona como hoy. Ni tan serena pero tan pesarosa...
Tampoco creo que me haya ido alguna vez con ganas de volver.
Siento una pesadez en mi panza: como si las millones de palabras pesaran y las billones de letras estuvieran por estallar, pero por el típico "qué dirán..." se quedan quietas en un cuerpo inquieto y en un alma vagabundo... Cómo si todo girara entorno a eso. Como si eso girara solo entorno a mí.
Como si yo fuera la luna, otra vez, y tú, todas las estrellas.
Como si las estrellas hicieran toda la labor por mí. Y, yo, ausente en Gerona, apagar a la ciudad, pero por un instante nada más.
Herczeg Yael


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